La verificación vehicular y el pago de tenencia son obligaciones que los propietarios de automóviles en México deben cumplir regularmente, aunque los requisitos y montos varían significativamente dependiendo del estado donde esté registrado el vehículo. Entender estas diferencias y cumplir oportunamente con estos trámites no solo te mantiene dentro de la legalidad, sino que te evita multas considerables y problemas al circular.
Cada año, miles de conductores enfrentan sanciones económicas y complicaciones administrativas por desconocer las fechas límite, los requisitos específicos de su entidad o las consecuencias de no realizar estos trámites a tiempo. La buena noticia es que con información clara y organización, cumplir con estas obligaciones puede ser un proceso sencillo y sin contratiempos.
La verificación vehicular es un programa ambiental diseñado para medir y controlar las emisiones contaminantes que generan los automóviles. Este trámite consiste en llevar tu vehículo a un centro de verificación autorizado donde se realizan pruebas para determinar si las emisiones de gases están dentro de los límites permitidos por las normas ambientales.
El objetivo principal de este programa es reducir la contaminación atmosférica en las principales zonas metropolitanas del país, protegiendo la salud pública y el medio ambiente. Aunque la verificación es obligatoria en la mayoría de los estados, su implementación, periodicidad y requisitos específicos varían considerablemente de una entidad a otra.
En la Ciudad de México y el Estado de México, por ejemplo, la verificación es obligatoria cada seis meses para la mayoría de los vehículos, mientras que en otros estados puede ser anual o incluso no existir como requisito. Los vehículos nuevos generalmente cuentan con exenciones temporales que van de uno a dos años, dependiendo del estado y el año modelo del automóvil.
Es importante destacar que la verificación no solo evalúa las emisiones contaminantes, sino que también verifica que el vehículo cuente con el equipo de seguridad básico como cinturones de seguridad funcionales, luces en buen estado y llantas en condiciones adecuadas. Aprobar la verificación te otorga un holograma que debe colocarse en el parabrisas y que indica el nivel de emisiones de tu vehículo, lo cual determina las restricciones de circulación que pueden aplicar.
La tenencia es un impuesto estatal que grava la propiedad de vehículos automotores. Aunque hace algunos años era un impuesto federal obligatorio en todo el país, actualmente cada estado decide si lo cobra o no, así como los montos y condiciones específicas para su aplicación.
Actualmente, solo algunos estados mantienen vigente el cobro de tenencia, entre ellos la Ciudad de México, Estado de México, Morelos, Veracruz, Michoacán y Puebla. Los montos varían significativamente según el valor factura del vehículo, su año modelo, el tipo de automóvil y las políticas fiscales de cada entidad. En general, los vehículos más nuevos y de mayor valor pagan cantidades más elevadas.
En la Ciudad de México, por ejemplo, están exentos del pago de tenencia los vehículos con valor factura menor a 250 mil pesos, así como los automóviles híbridos y eléctricos. Para los vehículos que sí deben pagar, el monto puede oscilar entre unos cuantos miles de pesos hasta cifras de cinco dígitos para automóviles de lujo o alto cilindraje.
El pago de tenencia generalmente se realiza de enero a marzo de cada año, aunque muchos estados ofrecen descuentos significativos por pronto pago si liquidas tu adeudo en enero o febrero. Algunos estados también permiten pagos parciales o diferidos para facilitar el cumplimiento de esta obligación fiscal. Es fundamental verificar las fechas y condiciones específicas de tu estado para aprovechar estos beneficios.
Aunque el proceso general de verificación es similar en todo el país, cada estado establece sus propios requisitos y calendario. En la Ciudad de México y el Estado de México, debes presentar tu tarjeta de circulación vigente, comprobante de pago de tenencia del año en curso si aplica, y en algunos casos, el comprobante de verificación anterior.
Los centros de verificación autorizados están distribuidos por toda la entidad y puedes elegir el que te resulte más conveniente. Es recomendable agendar tu cita en línea para evitar tiempos de espera prolongados, especialmente en los últimos días de cada periodo de verificación cuando la demanda aumenta considerablemente.
En estados como Jalisco, Nuevo León y Guanajuato, la verificación es obligatoria pero generalmente anual. Los requisitos son similares: tarjeta de circulación, identificación del propietario y en algunos casos, comprobante de domicilio. Algunos estados han implementado sistemas de verificación que consideran la antigüedad del vehículo, eximiendo o reduciendo la frecuencia de verificación para automóviles más recientes.
Para los estados que no tienen programa de verificación obligatorio, es importante consultar si existen requisitos ambientales alternativos o si se solicita algún tipo de inspección vehicular para ciertos trámites como el cambio de propietario o la renovación de placas.
Circular sin verificación vigente o sin haber pagado la tenencia puede resultar en multas significativas que varían según el estado y la gravedad de la infracción. En la Ciudad de México, por ejemplo, no contar con verificación vigente puede generar una multa de entre 20 y 30 veces la Unidad de Medida y Actualización (UMA), lo que se traduce en varios miles de pesos.
La multa por no pagar tenencia también puede ser considerable, además de que el adeudo se va acumulando año con año, generando recargos y actualizaciones que incrementan significativamente la deuda. En algunos estados, el no pago de tenencia puede incluso impedir que realices otros trámites vehiculares como el cambio de propietario o la renovación de placas.
Una situación particularmente problemática es cuando el vehículo obtiene holograma de doble cero o cero en la verificación pero el propietario olvida acudir a recoger el calcomanía correspondiente. En estos casos, circular sin el holograma visible puede resultar en infracciones, aunque técnicamente el vehículo sí cumplió con la verificación.
Para evitar estas multas, lo más efectivo es organizarte con anticipación. Marca en tu calendario las fechas límite de verificación según tu terminación de placa, y aprovecha los primeros meses del año para liquidar la tenencia si aplica en tu estado. Muchos estados ofrecen aplicaciones móviles y portales en línea donde puedes consultar tus adeudos, agendar citas para verificación y realizar pagos, facilitando enormemente el cumplimiento de estas obligaciones.
Recuerda que mantener tu vehículo en regla no solo te evita sanciones económicas y problemas legales, sino que contribuye a la protección del medio ambiente y garantiza que tu automóvil circule de manera segura. Consulta regularmente la información oficial de tu estado, ya que los requisitos y montos pueden actualizarse periódicamente, y mantén siempre contigo la documentación vehicular completa para cualquier eventualidad.